En estos días que estoy pasando en Brasil sonrío mucho a una cámara. No se trata de la cámara de mi portátil cuando contacto por video conferencia con familiares o amigos. Me refiero a la cámara que vigila la entrada al bloque de apartamentos donde vivo. Ya me resultó extraño que el profesor de la universidad que me invita no me diera llaves del portal general. En vez de eso bajó conmigo para presentarme al portero –vigilante de seguridad- del bloque. A los pisos modernos de las nuevas zonas residenciales de Sao Paulo, de unas 20 plantas como mínimo, se entra sonriendo a cámara. Gracias a ella te ve el portero en su cabina de seguridad emplazada delante del bloque, algo elevada para otear mejor la calle, con cristales tintados. Él te abre a distancia la primera puerta. Entras a un espacio enrejado. Cuando se cierra la primera puerta se puede abrir la segunda; como algunos bancos en España. También hay cámaras en el ascensor, aparcamientos y otras dependencias.
En el pequeño mundo de mi bloque hay muchos espacios vigilados. En el gran mundo en el que habito cada vez hay más posibilidades de que alguna tecnología también supervise mis comportamientos. Mi interés por esta realidad proviene de una noticia de la semana pasada. Un blogger daba a conocer un software para smartphones, CARRIER IQ, que trabaja en segundo plano (sin que el usuario del terminal sea consciente), y es capaz registrar la localización, grabar conversaciones, revisar correos electrónicos y registrar las pulsaciones de las teclas cuando se escribe un mensaje. Casi nada. Pese que algunos investigadores dicen que se está exagerando, el tema ha llegado al congreso americano para ser investigado; y ya se informa de cuáles son las compañías y terminales que usan este software.
Formas modernas de almacenamiento masivo de información privada en el mundo supuestamente civilizado. Para aquellos países donde las libertades son aparentemente menores hay un sinfín de soluciones para vigilar la actividad de los ciudadanos, potenciales revolucionarios.Las empresas occidentales ofrecen todo un catálogo de productos tecnológicos a buena relación calidad precio. Continue reading






